Internacional

Dos militares condenados a 10 años de cárcel cada uno por robo y secuestro  

El Tribunal del Circuito de Asante Bekwai (Ghana) ha condenado a dos soldados a diez años de prisión cada uno con trabajos forzados por secuestrar y robar 96.500,00 GH₵ a un pequeño minero. 

El cabo primero de la Fuerza Aérea Alfred Mensah, de 33 años, y el cabo primero Matthew Amoako, de 28, negaron haber conspirado para robar y secuestrar al Sr. Andrews Asante. 

Luego fueron sometidos a un juicio completo y declarados culpables. 

Mientras tanto, tres de sus cómplices, identificados únicamente como Frimpong y Francis, ambos soldados, así como Francis Acheampong, de 41 años, conductor, están prófugos. 

El inspector jefe detective Eric Twum, quien narró el caso ante el tribunal presidido por el Sr. Isaac Appeatu, dijo que el Sr. Asante, el demandante, era un minero en pequeña escala residente en Ametubuom, un suburbio de Asiwa, mientras que Mensah y Amoako son oficiales de la Fuerza Aérea con base en Accra y Tamale, respectivamente, pero ambos estaban en un curso en Accra.  

Dijo que Acheampong, el conductor, trabajaba con una empresa de alquiler de automóviles en Accra, mientras que Frimpong y Francis, también militares destinados en Kumasi, estaban prófugos. 

La fiscalía dijo que Acheampong, después de reunirse con los soldados el 25 de noviembre de 2023, y sabiendo que iban a realizar una expedición de robo, los condujo hasta el secretario de su compañía.  

Le dijo que Mensah, Amoako y Frimpong iban a efectuar un arresto en Konongo, por lo que alquilaron un Mitsubishi Pajaro con matrícula GS 3236-17, que Acheampong fue asignado a conducir.  

El inspector jefe detective Twum dijo que partieron de Accra aproximadamente a las 14.00 horas y al llegar a Konongo recogieron a Francis, añadiendo que vestían uniforme militar.  

Frimpong, según escuchó el Tribunal, quien afirmó ser nativo de Asiwa, los condujo a Ametubuom, una comunidad cerca de Asiwa, a la residencia del denunciante alrededor de la 01.30 horas, donde gritaron su nombre, golpearon la puerta y le pidieron que saliera.  

Por temor a su vida, se negó a salir hasta que la pandilla atacó a su amigo, un tal Kwabena, a quien su esposa llamó para que viniera a rescatarlos. 

Los convictos, dijo la policía, volcaron su ira contra el denunciante cuando finalmente salió y lo empujaron de nuevo a su habitación, donde lo sometieron a palizas y le exigieron GH₵400,000.00 antes de liberarlo.  

Dijo que el denunciante no tenía el monto pero por temor a su vida y a su familia pidió prestado.  

GH₵10,000 00 de su suegra que vivía en la misma casa, y se los entregó.  

La policía dijo que no satisfecha, la pandilla continuó golpeando al denunciante mientras exigían más dinero, pero él le suplicó a la suegra que añadiera más, si tenía, a lo que ella accedió y sacó GH₵20,000.00 adicionales envueltos en una bolsa de polietileno negra y se los entregó a los ladrones.  

La fiscalía dijo que Amoako empujó a la suegra hacia su habitación cuando la pandilla se dio cuenta de que tenía más dinero en la habitación, donde saquearon la habitación y recuperaron GH₵40,000.00 y luego fueron a la habitación del denunciante, saquearon el lugar también y se llevaron GH₵15,000.00.  

Nuevamente confiscaron GH₵7,000.00 a Kwabena, así como la llave de encendido de la motocicleta en la que venía, con la intención de evitar que los persiguiera, según escuchó el Tribunal.  

Aún no satisfechos con todo el dinero que robaron, empujaron a la fuerza al denunciante a su vehículo y lo retuvieron para pedir un rescate.  

El inspector jefe detective Twum dijo que, mientras el denunciante estaba en su vehículo, Mensah lo registró y sacó GH₵4.500,00 de su bolsillo, afirmando que, en total, tenían un botín de GH₵96.500,00. La policía se enteró del incidente y les hizo señas para que se detuvieran, pero no hicieron caso y se fueron a toda velocidad.  

Dijo que la policía disparó contra el vehículo, pero eso los detuvo hasta que llegaron a un puente roto en Anwiam. El vehículo no pudo cruzar el puente roto, por lo que lo abandonaron y continuaron a pie hacia un bosque, manteniendo al denunciante como rehén, dijo.  

La Fiscalía dijo que algunos miembros de las comunidades cercanas también se enteraron del incidente y fueron a buscarlos, diciendo que, como la pandilla estaba en el bosque con su víctima y su botín, también estaban tratando de encontrar la salida.  

Aproximadamente a las 04.30 horas, Mensah y Amoako aparecieron en la ciudad de Anumso, buscando un vehículo para escapar, pero fueron arrestados por los habitantes de la ciudad y luego entregados a la policía.  

Frimpong y Francis esperaron a Mensah y Amoako y cuando no regresaron, abandonaron al denunciante y huyeron a través del bosque.  

La fiscalía dijo que ambos fueron arrestados posteriormente y admitieron los delitos y mencionaron a sus cómplices.  

Mensah dijo a la policía que los vecinos del pueblo se llevaron el botín y los arrestaron. Más tarde, de su escondite en el bosque, recuperaron un chaleco antibalas, el dispositivo de ayuda para caminar del denunciante y la llave de encendido de la motocicleta de Kwabena. 

Vía Graphic

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