Sociedad

El tereré: historia, tradición y su reconocimiento mundial

Cada último sábado de febrero, Paraguay celebra con orgullo el Día Nacional del Tereré, una jornada dedicada a honrar la bebida tradicional que forma parte de la identidad cultural del país. Esta infusión fría, elaborada con yerba mate y agua helada, es mucho más que una simple bebida refrescante: es un símbolo de encuentro, amistad y resistencia cultural.

El origen del tereré

El tereré tiene sus raíces en las antiguas costumbres de los guaraníes, quienes ya consumían la yerba mate en tiempos prehispánicos. A diferencia del mate caliente, que es popular en Argentina, Uruguay y el sur de Brasil, el tereré se caracteriza por su preparación con agua fría o jugos naturales, lo que lo convierte en la opción ideal para combatir el calor de la región.

Durante la Guerra del Chaco (1932-1935), los soldados paraguayos popularizaron aún más su consumo, ya que, debido a las altas temperaturas y la escasez de agua caliente, optaban por tomar la infusión con agua fría. Así, el tereré se consolidó como un emblema nacional, siendo adoptado por todas las generaciones y extendiéndose incluso a otras partes del mundo.

Día Nacional y Patrimonio de la Humanidad

El reconocimiento del tereré como parte del acervo cultural paraguayo se oficializó en el año 2011, cuando el Congreso Nacional declaró el último sábado de febrero como el “Día Nacional del Tereré y la Cultura Paraguaya”. Este día no solo resalta la importancia de la bebida, sino que también promueve su historia y la tradición de compartirla en ronda, reforzando los lazos comunitarios.

El 17 de diciembre de 2020, la UNESCO reconoció el “tereré en la cultura paraguaya” como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, destacando su valor como una práctica social que fomenta el sentido de pertenencia y la identidad nacional. Este reconocimiento internacional reafirma la importancia del tereré como una tradición que trasciende generaciones y fronteras.

Más que una bebida, un símbolo de identidad

En Paraguay, el tereré es más que un hábito: es una forma de vida. Ya sea en reuniones familiares, encuentros entre amigos o incluso en el ámbito laboral, compartir un tereré representa hospitalidad y camaradería. La costumbre de pasar el guampá (recipiente) de mano en mano fortalece la conexión entre las personas y preserva una tradición que ha resistido el paso del tiempo.

Hoy, con su reconocimiento como Patrimonio de la Humanidad y la celebración de su Día Nacional, el tereré sigue siendo un símbolo indiscutible de la identidad paraguaya y una herencia cultural que el país comparte con el mundo. 🧉🇵🇾

Vía Nahuel Hidalgo

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